Nahir Galarza salió del penal de Paraná para asistir a clases de música

La joven espera que la Corte Suprema decida realizar un nuevo juicio que revise su condena a prisión perpetua.

El vocero de la familia de Nahir Galarza, Jorge Zonzini, compartió en su cuenta de Twitter que su representada goza de salidas educativas fuera de la Unidad Penal de Mujeres Número 6 de Paraná. La joven de 23 años, condenada a cadena perpetua, asiste a clases de música en un centro de estudios del servicio penitenciario que se ubica en frente al penal donde está alojada. 

"Mientras la Corte Suprema de Justicia de la Nación revisa el fallo récord, misógino y machista, Nahir Galarza asiste a sus clases de música", marcó el letrado.

En los tres años que lleva privada de su libertad, Nahir comenzó a estudiar Psicología y realizó otros cursos recreativos. Además, trabaja en la lavandería del penal y lleva adelante un tratamiento psicológico. En tanto, recibe las visitas de su madre, pero mantiene distancia con su familia paterna.

El pasado 13 de enero, Galarza declaró ante el fiscal Mauricio Guerrero que su padre Marcelo Galarza fue el autor del crimen por el que ella está condenada a cadena perpetua. De esta manera, Nahir ratificó la denuncia realizada por su abogada, Raquel Hermida Leyenda, que fue desestimada por la Justicia y ahora espera su resolución en la Corte Suprema. "Yo no maté a Fernando, mi papá lo mató. Yo soy inocente", dijo.

La muerte de Fernando Pastorizzo
El crimen de Pastorizzo (20) ocurrió el viernes 29 de diciembre de 2017, cuando el joven fue encontrado en una calle de Gualeguaychú con un tiro en la espalda y otro en el pecho, junto a su moto y dos cascos tirados en el suelo.

A la mañana siguiente, y al conocerse la noticia, la joven publicó una foto de ambos en las redes sociales y escribió: "5 años juntos, peleando, yendo y viniendo, pero siempre con el mismo amor. Te amo para siempre, mi ángel".

El 3 de julio de 2018 el Tribunal de Juicio y Apelaciones de Gualeguaychú la condenó por a prisión perpetua. Ese fallo fue confirmado en julio de 2019 por la Sala II de la Cámara de Concordia.